La Isla de Jurryland surge de la necesidad de utilizar una estrategia metodológica que permita a los alumnos del grado superior de Educación Infantil conocer un tipo de enseñanza diferente al método tradicional y que les muestre cómo es posible aprender unos contenidos desde la propia experiencia y disfrutando del proceso de aprendizaje.
La Isla de Jurryland pretende ser una práctica educativa en la que chicos y chicas aprendan mientras actúan sobre necesidades reales con la finalidad de mejorarlas. Pretendemos estimular en ellos el esfuerzo, la responsabilidad, el compromiso solidario y la sensibilización. Sin embargo, no nos limitaremos a la sensibilización, sino que pasaremos a la acción, comprometiéndonos a aportar mejoras desarrollando un proyecto solidario del cual, el juego será el principal impulsor.
Introduciremos elementos propios de la gamificación como motor de la motivación del alumnado. A medida que se vaya desarrollando el proyecto, irán obteniendo herramientas, a modo de recompensa que podrán utilizar más adelante en las nuevas misiones que tengan que llevar a cabo. También conseguirán privilegios que les permitirán alguna ventaja en su quehacer diario. Ascender de nivel y conseguir recompensas es otra mecánica de la gamificación que estará presente para aumentar su involucración en el proyecto así como la motivación, todo acorde a la narrativa creada en el proyecto.
Serán los cuentos, el juego y el trabajo cooperativo las principales herramientas de este proyecto, a través de los cuales trabajaremos los contenidos y las competencias clave necesarias para contribuir al desarrollo íntegro de los alumnos al mismo tiempo que aportamos nuestro granito de arena contribuyendo a puesta en práctica de nuevas metodologías pedagógicas que favorezcan un cambio en el proceso de enseñanza aprendizaje.
