Disfrutando de la vida cavernícola
Una de los retos de nuestra segunda misión era convertirnos en auténticos cavernícolas y experimentar por nosotros mismos cómo era la vida en esta época. Para lograrlo hemos decidido realizarnos nuestros propios vestidos. Hemos cambiado el lápiz, cuaderno, libro y iPad por aguja, hilo, piel, cuerda, piedras....y nos hemos puesto manos a la obra para confeccionar nuestros propios vestidos. Todo ello tras haber investigado la invención del vestido y realizar el trabajo pertinente para ser expuesto en nuestro particular museo de la línea del tiempo.
Los logros, alumnos motivados, divirtiéndose, trabajando en equipo y colaborando, demostrando auténtica creatividad, en fin una experiencia totalmente gratificante que te hace salir feliz de clase con la sensación de haber cumplido el objetivo propuesto.
Por cierto, el resultado realmente ESPECTACULAR, a mí me han dejado con la boca abierta con su creatividad, han incluido bolsillos, botones, ya veréis ya,...